Durante los primeros ocho meses del año, Argentina experimentó un notable incremento en sus exportaciones de combustibles y energía, alcanzando un récord de USD 6.407 millones. Este monto representa un aumento del 25,5% respecto al mismo período de 2023 y constituye el 12,3% de las exportaciones totales. En contraste, las importaciones de combustibles y lubricantes disminuyeron un 45%, sumando USD 3.250 millones y representando el 8,4% del total importado.

Este escenario llevó a un saldo comercial energético positivo de USD 3.157 millones hasta agosto, equivalente al 22% del superávit comercial total de USD 14.151 millones. Además, agosto marcó un hito histórico en la producción de hidrocarburos. Casi 720.000 barriles diarios de petróleo (un 14% más que en agosto de 2023). Además, de 153 millones de metros cúbicos diarios de gas natural (un incremento interanual del 6,3%).

El impulso detrás de estos logros se atribuye al desarrollo de Vaca Muerta, que ha transformado radicalmente el sector hidrocarburífero argentino en las últimas dos décadas. Entre 2003 y 2013, la producción de petróleo y gas disminuyó significativamente. Pero desde entonces, la producción diaria de gas natural casi se ha cuadruplicado gracias a este yacimiento no convencional.

A pesar de estos avances, resulta contradictorio que el gobierno advierta sobre posibles complicaciones en la generación, transporte y distribución de electricidad durante el próximo verano. Aunque se promueve la transición energética, el petróleo y el gas continúan siendo las principales fuentes de energía primaria en el país. Lo que genera preocupaciones sobre la capacidad de satisfacer la demanda eléctrica.

En cuanto al futuro, proyectos como «Argentina GNL» liderado por YPF y Petronas buscan posicionar al país como un exportador clave de gas natural licuado (GNL) en el mercado global. Aunque existen rumores sobre el posible retiro de Petronas, el proyecto sigue adelante debido al potencial gasífero de Argentina. Simultáneamente, Pan American Energy (PAE) firmó un contrato con Golar LNG para licuar gas natural a partir de 2027 en una plataforma flotante. Aprovechando así la capacidad ociosa del Gasoducto San Martín.

PAE y Golar, aunque de menor escala que el de YPF y Petronas, representa una iniciativa estratégica que podría ampliarse en el futuro. Con una inversión inicial de USD 300 millones, se planea procesar 11,5 millones de metros cúbicos diarios de gas natural. Con miras a escalar el proyecto y sumar más compañías locales como proveedoras de gas.

El mercado mundial de GNL ha crecido aceleradamente, especialmente tras la invasión de Rusia a Ucrania y la interrupción del suministro de gas ruso a Europa. Desde 2010, la participación del GNL en el comercio mundial de gas aumentó del 31% al 45% en 2023. Según los analistas y expertos, se prevé que esta tendencia continúe. Argentina apunta a ser competitiva en este mercado, buscando precios alrededor de USD 8 por millón de BTU, similar a los ofrecidos por Estados Unidos.

Expertos del sector señalan que el GNL será el medio para que Argentina alcance una verdadera escala en su industria hidrocarburífera. La cual actualmente se encuentra muy limitada por la capacidad de transporte. Se proyecta que el superávit comercial energético cierre el año cercano a los USD 5.000 millones. Una mejora significativa respecto al déficit de USD 4.500 millones registrado hace dos años.