El día de ayer varios tucumanos pudieron notar la reducción de 25% del servicio anunciada el pasado miércoles por AETAT donde además advirtieron que se suspenderá temporalmente a choferes a partir de la semana próxima. Ante esto representantes de Unión Tranviarios del Automotor (UTA) convocaron a una asamblea ayer por la tarde para determinar cual será su proceder y FODECUS presentó en el Consejo Deliberante un pedido para aplicar sanciones a las empresas de transporte.

Tras el anuncio de AETAT, César Gonzáles, secretario general de UTA, afirmó que se enteraron por los medios sobre la decisión y que «no sabían nada». En ese marco, se reunieron ayer por la tarde con todos los delegados de las empresas para determinar las acciones que van a llevar adelante a partir de este anuncio.

Aseguraron que no aceptarán «bajo ningún punto de vista la suspensión del personal», por lo que se seguirá analizando cual serán los pasos a seguir. Es por esto, que se contempla la posibilidad de un nuevo paro de colectivo para la semana que viene en contra de las medidas de AETAT.

Por su parte José García, referente de la Federación de Organizaciones en Defensa de los Consumidores y Usuarios (FODECUS), en un móvil para VOVE Tucumán, expresó el malestar ante la decisión tomada por los empresarios y anunció que, de no tener pronta respuesta a su pedido, convocarán a los usuarios a una junta de firmas la próxima semana. «Consideramos que es una medida ilegal que perjudica a miles de usuarios y que no tiene nada que ver con que a ellos les paguen poco o mucho», enunció.

Además cuando se le consultó si considera verídico los dichos de los empresarios respecto a que están en quiebra respondió que deberían investigarlos, y agregó que «para nosotros no están en quiebra lo que pasa es que ellos no tienen las ganancias que quieren tener». Por último afirmó que esperarán que el Consejo responda hasta el día lunes y de no ser así «lo más seguro es que el martes estaremos tomando distintas medidas», aseguró.

Fueron muchas las personas que manifestaron su enojo ante la reducción de los servicios el día de ayer. Unas de las quejas que más se repitieron tienen que ver por los colectivos colmados en horarios pico, las largas esperas en las paradas de zonas peligrosas en horarios de la noche y que debido a las demoras mucha gente no puede llegar a tiempo a sus respectivas actividades.