Con la reciente baja de diez puntos del impuesto PAIS, oficializada este lunes, el mercado automotor en Argentina comienza a sentir los primeros efectos en los precios de los vehículos. Toyota Argentina ha tomado la iniciativa al reducir un 2% los precios de sus productos nacionales y hasta un 4% en los importados. Marcando así, una tendencia que podría arrastrar a otras marcas a seguir su ejemplo para mantenerse competitivas.

El impacto ya se refleja en las listas de precios de las automotrices que comenzaron a llegar a los concesionarios. Este ajuste afecta tanto a los vehículos que provienen de Brasil como a los de extra zona. Es decir, aquellos que llegan de mercados sin convenios de arancel 0%.

El modelo Toyota Yaris, uno de los más accesibles de la marca, ha experimentado una disminución notable en su precio. La versión XS 1.5 con caja manual, que en agosto costaba $21.205.000, ahora se ofrece a $20.357.000. Del mismo modo, la versión S 1.5 CVT pasó de $27.541.000 a $26.439.000, reflejando la baja en el costo de importación.

Impacto en otras marcas

Ford es otra de las marcas que ha decidido seguir esta tendencia, aunque aún no ha publicado su lista de precios actualizada. Sin embargo, fuentes cercanas a la empresa han confirmado que se espera una reducción del 2% en los modelos fabricados en General Pacheco, como la Ranger. Y de hasta un 3% en los vehículos importados como la Ford Maverick, Kuga Híbrida y Bronco.

Otras automotrices aún están evaluando sus estrategias de precios, pero es probable que la movida de Toyota marque la dirección a seguir. Hugo Belcastro, importador de BAIC y presidente de CIDOA, comentó en una entrevista radial que la baja del impuesto PAIS ya está teniendo impacto, aunque el efecto varía según el modelo y su origen. Algunos vehículos podrían experimentar una reducción de hasta el 8%.

Perspectivas del mercado

Analistas del sector automotor han señalado que la decisión del gobierno de reducir el impuesto PAIS busca que los consumidores vean reflejados los ahorros en los precios de los vehículos. Aunque las automotrices ya han pagado este impuesto en las importaciones anteriores, algunas marcas están absorbiendo el costo para mantener su competitividad en el mercado.

Este ajuste en los precios podría desencadenar una serie de movimientos en el mercado automotor, donde las marcas que no sigan esta tendencia podrían enfrentarse a dificultades para vender sus unidades, mientras que aquellas que apliquen las reducciones de precios podrían ganar participación en el mercado.