El té de manzanilla no solo es una bebida reconfortante, sino que también es un potente aliado para la salud con una rica historia de uso en diversas culturas. Sus propiedades calmantes y curativas han ganado popularidad debido a sus múltiples beneficios terapéuticos.

La manzanilla, o Chamaemelum nobile, es una de las hierbas medicinales más antiguas y populares del mundo. Utilizada principalmente en forma de infusión, esta planta es reconocida por sus propiedades calmantes, antiinflamatorias, antisépticas, digestivas y diuréticas, gracias a sus componentes activos como los terpenoides y flavonoides.

El té de manzanilla ha sido objeto de numerosos estudios que destacan sus beneficios. Entre los más destacados se encuentran:

  1. Propiedades antiinflamatorias y antisépticas: ayudan a mejorar el funcionamiento del hígado, eliminar bacterias perjudiciales y reducir la inflamación.
  2. Salud digestiva: es conocido por aliviar molestias estomacales, náuseas y cólicos. Sus propiedades antiespasmódicas ayudan a relajar los músculos del tracto gastrointestinal, facilitando el paso de los alimentos y reduciendo molestias abdominales.
  3. Mejora de la calidad del sueño: el té de manzanilla contiene antioxidantes como la apigenina, que se une a receptores en el cerebro para inducir la relajación y mejorar la calidad del sueño. Estudios han demostrado que su consumo regular puede reducir los síntomas de insomnio y depresión, especialmente en nuevas madres y personas mayores.

Cómo preparar té de manzanilla

  1. Calentar un litro de agua hasta que hierva.
  2. Añadir una cucharada de flores de manzanilla secas al agua recién hervida.
  3. Dejar reposar la infusión durante unos 5 a 10 minutos.
  4. Filtrar la mezcla para eliminar las flores de manzanilla.
  5. Servir el té en una taza y, si se desea, endulzar con miel al gusto.

El té de manzanilla es seguro para beber en varias ocasiones durante el día y no tiene efectos secundarios significativos. La profesora asociada de investigación Suzanna Zick de la Universidad de Michigan sugiere que si se encuentra que esta infusión es eficaz, no hay razón para dejar de consumirla regularmente.