Apenas asumió la Intendenta de la Capital, Rossana Chahla, junto a los concejales capitalinos, recibieron un petitorio por parte de los taxistas que circulan por San Miguel de Tucumán. La nota, que lleva la firma de Julio Rodríguez, exhorta a los ediles a analizar un aumento en la tarifa del 80 %.

El secretario gremial de la Federación de Taxistas, aseguró que el incremento es «sumamente necesario», teniendo en cuenta la escalada inflacionaria por la que atraviesa el país en su conjunto. Asimismo, Rodríguez aseguró que hoy en día ni el propietario del taxi ni mucho menos el chofer, pueden vivir con los números que se manejan actualmente y desarrollar una vida normal. «Estimamos que el presidente del Concejo, Fernando Juri, nos dará la posibilidad de hacer una audiencia y tratar el tema», concluyó.

El precio de la bajada de bandera quedaría a $320 y $30 la ficha en comparación a su precio actual que es de $180 la bajada de bandera y $18 la ficha cada 100 metros. El último incremento las tarifas se aprobó en junio de este año por el Consejo, una medida que en ese momento no había dejado conforme al gremio.

Posteriormente, durante el mes de septiembre los taxistas habían presentado un pedido para aumentar un 50% ese valor. Ese pedido prontamente fue dejado de lado por otras de sus luchas: conseguir la promulgación de la ley que prohíbe la circulación de plataformas como UBER. Tras varias jornadas de protestas y cortes de calle, el actual gobernador y en su momento vicegobernador Osvaldo Jaldo, convocó el pasado 13 de septiembre a los taxistas autoconvocados y derogó la Ley 9.352 que regulaba el servicio de transporte privado de pasajeros a través de plataformas electrónicas, algo que dejó satisfechos a los conductores quienes decidieron terminar con las medidas de fuerza.