El plan de obras de restauración de la Iglesia San Francisco avanza a ritmo acelerado y está previsto que la primera etapa de los trabajos esté finalizada este viernes, para los festejos patrios del 9 de Julio. El templo volverá a mostrar una reluciente fachada con sus colores originales: celeste, rosa y amarillo.

El arquitecto Andrés Nicolini, integrante de la Comisión de Patrimonio Histórico de la provincia, comentó sobre el progreso de la obra. «Estamos terminando la primera parte de la restauración del cuerpo de fachada del templo de los franciscanos. Es un proyecto que se elaboró junto con las arquitectas Ana Lozano y Laura Cuezzo. El año pasado estuvimos trabajando en el sector alto, que corresponde al campanario. Y este año retomamos para completar el frente de este cuerpo de fachada».

Apoyo y colaboración

Nicolini destacó el apoyo recibido por la comunidad y las instituciones: «Es un proyecto que viene contando con el apoyo de la comunidad en general. La comisión viene gestionando el apoyo y la consecución de fondos por parte de la comunidad y también tratando de interesar a los poderes públicos. El Gobierno de la provincia nos dio algunos aportes, de Nación hubo menos respuesta y la municipalidad viene siendo nuestro principal soporte».

Valor histórico

El arquitecto explicó el valor histórico del templo: «El templo que estamos tratando de recuperar está dedicado a San Miguel Arcángel, el santo patrono de la ciudad». Además, subrayó que la iglesia forma parte del conjunto de templos y conventos que ocupan un cuarto de lo que se llamaría la manzana jesuítica.

La restauración de la fachada de la Iglesia San Francisco no solo devolverá al templo su esplendor original, sino que también reforzará el valor cultural y patrimonial de este importante monumento histórico. La comunidad espera con entusiasmo la inauguración de la nueva fachada el viernes, en el marco de los festejos por el Día de la Independencia.