Así lo advirtieron algunos supermercadistas de la provincia. La escasez se debería al aumento de los precios de los granos, derivados del conflicto bélico en Europa.

“Hasta hace unos meses no había desabastecimiento, se conseguía cupificado pero desde el inicio de la guerra la situación se agravó. Ahora tenemos los precios bastante elevados, pero no hay aceites para la venta. No están entregando aceites y los precios son muy elevados. En algunas góndolas hay aceites y en otra no”, dijo Guillermo Saccomani, presidente de la Cámara de Supermercados y Autoservicios.

“Habrá que ver cómo se manejan con el cupo, porque algunos van a poder acceder al producto y otros no. Está complicada la situación”, finalizó. Esto sucede especialmente en el interior del país, donde las cadenas de supermercados ya salieron a advertir por escasez no solo de aceites, sino también de harinas y sus derivados.

La incertidumbre respecto de cuándo terminará la guerra y cuál será entonces el costo de reposición, hace que muchos empresarios prefieran guardar el producto o entregarlo con precio a convenir.