Un periodista tucumano sufre un calvario luego de señalar a vecinos de un asentamiento cercano al domicilio de sus padres. Un grupo de delincuentes no identificados, ingresó al domicilio del periodista Sergio González, ubicado en la Villa Obrera de Tafí Viejo. Tras irrumpir en el inmueble, los sujetos causaron daños en la propiedad y amenazaron de muerte a la familia. A pesar de las denuncias, los agresores no fueron detenidos aún y el periodista solicitó protección a las autoridades del Ministerio de Seguridad. Los hechos sucedieron luego de que en el día de ayer, el periodista de Canal Ocho, denunciara públicamente robos y hechos vandálicos por parte de los mismos sujetos.

El abogado de la familia, Gustavo Carlino, brindó detalles del caso y relató el grave hostigamiento sufrido en manos de los delincuentes. La familia es víctima de violentos sucesos que incluyen robos y golpes. ”Ingresaron a su domicilio, violaron la propiedad por el fondo. Rompieron todos los vidrios y a los gritos amenazaban que iban a prenderlos fuego y que iban a matar a todos”, relató el abogado. Por otro lado, explicó el estado de desprotección que sufre la familia. “Esta gente que vive de y para el delito, redobló la apuesta, por el solo hecho de que Sergio es un comunicador y está visibilizando un situación ilegal, ilícita y antijurídica. No estigmatizamos los asentamientos, pero esta gente que vive para el delito se siente amenazada, porque si hay medida de coerción, detención y allanamiento, les arruinamos el negocio. Sergio no siente tranquilidad, él y su familia no se sienten cuidados, esto va a terminar mal”, manifestó. 

Pedido de seguridad

En el día de hoy, González y su defensor fueron recibidos por el ministro de Seguridad, Eugenio Agüero Gamboa, a quien solicitaron protección. No obstante, tras el encuentro, estos señalaron que el ministro solo les solicitó continuar denunciando a los sospechosos. Por este motivo, el periodista cuestionó el accionar de las autoridades y reiteró el pedido de seguridad para el grupo familiar

“Se dictaron algunas medidas, pero evidentemente están resultando insuficientes. Las medidas institucionales no están sirviendo. Con la logística no nos sentimos seguros. Los ataques se realizan en cuestión de segundos. Puede pasar un móvil cada media hora o una hora, pero esta gente en cinco minutos juntan 30 o 40 personas. Al ministro le plantee a dónde llevo a 11 integrantes de mi familia. Estamos esperando la respuesta y la seguridad que nos deben, porque el estado nos debe garantizar a todos y a cada uno de nosotros seguridad”, señaló González.