Esta mañana se llevó a cabo un nuevo acto (presencial después de dos años) para recordar y exigir justicia por el atentado a la Asociación Mutual Israelita Argentina (AMIA). El mismo fue perpetrado un día como hoy de 1994, dejó 85 víctimas fatales y más de 300 heridos. En aquella jornada, un coche bomba estalló en la puerta del edificio ubicado en Pasteur 633.

A las 9.53 las sirenas volvieron a sonar marcando el inicio formal del acto en el que se recordó a las víctimas y que contó con un fuerte mensaje del presidente de la mutual judía, Amos Linetzky. “Hoy es lunes 18 de julio, como ese lunes, apenas pasan las 10 de la mañana, y la herida todavía sigue sangrando. El dolor, como las fechas del calendario, es el mismo”, lamentó el presidente.

“¿Cómo se explica tanta impunidad?”, dijo el referente sobre los 28 años que transcurrieron desde el atentado por el cual todavía no hay responsables. Durante la jornada también hablaron sobrevivientes, familiares y amigos de las víctimas.

En la continuidad de su discurso, Linetzky convocó a “seguir la tradición de hacer oír juntos nuestra voz” y “exigir justicia y castigo a los culpables y responsables del atentado”. Asimismo, preguntó “¿cómo explicar que en 28 años no se ha podido atrapar siquiera a uno de los múltiples responsables de semejante atrocidad?” y lamentó que “los canallas, miserables y asesinos de 85 personas siguen disfrutando de su vida diaria, paseando por el mundo con total libertad”.

Además, el presidente remarcó la responsabilidad de altos funcionarios del gobierno iraní (de aquella época) en el atentado, como así también de miembros operativos del Hezbollah. En ese sentido, recordó que “estas personas tienen pedidos de captura internacional” y opinó que “no deberían poder salir de las fronteras de los países que los protegen”, denunciando que varios de los acusados viajan libremente por distintas naciones.

Ya casi al final de sus palabras, el representante hizo alusión al avión venezolano iraní retenido en suelo argentino. «No hemos aprendido nada, nuestras fronteras siguen siendo permeables y nuestros controles débiles”, alertó. Y concluyó: “En materia de lucha contra el terrorismo, la Argentina está exactamente igual que hace 30 años cuando sufrimos el primero de los atentados contra la Embajada de Israel en Buenos Aires”.