Polémicas declaraciones de Campero al referirse a la intención de voto: «analfabetismo», «ignorancia» y «pobres» como eje de su discurso
El actual intendente de Yerba Buena y legislador electo, Mariano Campero, se refirió a los resultados de las elecciones provinciales del 11 de junio. Campero expresó su preocupación por el sistema de acople electoral y presuntas prácticas fraudulentas por parte de algunos partidos políticos.
En una polémica entrevista, el intendente perteneciente al partido de Juntos por el Cambio manifestó: «A nivel provincial hago una lectura en donde con este sistema de acople fue muy difícil competir ¿Quién no tiene algún conocido, que le puede comentar que ha cobrado 20 mil pesos por ir a votar o 40 mil pesos por ser movilizador? Uno ve, por ejemplo, las colas del otro día en los bancos, cerca de las elecciones. Me refiero a la mal llamada estructura que, en definitiva, es dinero malgastado con tantos candidatos.»
El intendente remarcó, que la prioridad debería ser poner fin a la ley de acople para darle un rumbo claro a la provincia. «Me parece clave y es uno de los desafíos que tenemos, porque de lo contrario nos encontraríamos ante la presencia de un techo político. Ganar con este sistema, a un gobierno que invierte o gasta muchísimo dinero, es muy complejo», afirmó.
Declaraciones polémicas
El intendente hizo referencia a la situación de pobreza que atraviesa la provincia. En polémicas declaraciones expresó: «En los lugares más vulnerables, las personas son más ignorantes y, por lo tanto, más propensas a verse afectadas por prácticas. Como la compra de votos».
“Hay que entender cómo invade este sistema al electorado. En algunos lugares perfora más y en otros menos. Tenemos una provincia con un alto índice de pobreza” agregó. Luego, sugirió que en Yerba Buena, debido a que «hay casi un 0% de analfabetismo y la tasa más alta de universitarios», el voto no se vio afectado por el tipo procedimientos que atribuyó al oficialismo.
El intendente denunció un supuesto aprovechamiento de la pobreza de la gente, y que se ha vuelto un problema cultural. En ese sentido, se diferenció de sus opositores, y aseguró que mientras que algunos se benefician con la vulnerabilidad de algunas personas, ellos hacen una política limpia. Esto, afirmando que, desde el oficialismo, “se aprovechan de esa pobreza. Venden la pobreza. Nosotros no. Esto es un problema cultural». Además, agregó que la Ley de acoples «termina perjudicando al concepto real del por qué estamos aquí», concluyó, refiriéndose al sistema electoral.