Por línea sucesora hoy asumió de forma directa, Sandra Orquera como primera gobernadora mujer de la provincia en la historia. Quedó al frente del Poder Ejecutivo por la cumbre del pj que tiene lugar en Casa Rosada.

«Es un honor inmenso para mí, ocupar el sitio en el que supo estar el general Antonio Domingo Bussi, el último gran gobernador de Tucumán”, manifestó la legisladora bussista Sandra Orquera. Ella estará unas cuantas horas, al frente de Casa de Gobierno.

Una gobernación que llega con muchos antecedentes que nada tienen que ver con la lucha de los derechos de las mujeres en el norte del país. Sin haber realizado aportes a la Ley Micaela y habiendo dado su voto para declarar el territorio como «pro vida», pareciera una ironía que represente hoy a las tucumanas.

No se puede dejar de lado su militancia en Fuerza Republicana, la misma fuerza que puso un gobernador a un genocida y la misma que hasta hoy, desestima los casos de lesa humanidad. Además quien representa hoy el partido, está denunciado por abuso sexual el 10 de marzo de este año.

Además, la flamante gobernadora del día, ha sido vinculada a hechos de agresión en El Cadillal, por abuso de sustancias alcohólicas. Visto las declaraciones realizadas durante la mañana de hoy, se sigue ponderando a quien fue condenado por una larga lista de crímenes de lesa humanidad, como lo fue Antonio Domingo Bussi.

Como si todo se tratara de un estado onírico, un Bussi volvía a pisar el despacho de Casa de Gobierno. Ricardo Bussi fue a saludar a Sandra Orquera en lo que sería sus 24 horas de fama. Al salir, afirmó: “Hace falta un Bussi en la gobernación, como mi padre que construía soluciones”, el hijo del genocida.