En las últimas horas, el empresario y productor tucumano, Hernán Iramain, cruzó al presidente de la Unión de Bares y Hoteles de Tucumán, Ernesto Gettar. El mismo cuestionó que el directivo les dice a ellos una cosa, pero que en los medios declara otra totalmente diferente. Este hecho causó malestar en el sector y por eso la crítica y el fastidio de Iramain.

En medios locales, se cuestionó «por qué el Estado exige que los empresarios sean quienes deban controlar y que hay que hacer foco en otro lado y no en exigir el pase a los clientes». «Es lamentable este tipo de declaraciones en donde se acordó con el Gobierno que nosotros (los empresarios) seríamos los principales encargados de hacer cumplir esta norma», expresó el productor.

«No se entiende que salga a hacer este tipo de declaraciones cuando en Casa de Gobierno se comprometió y dijo una cosa . Ahora, ante los medios, sale dice todo lo contrario. Que se ponga de acuerdo. Si su preocupación es mantener activo al sector de bares y hoteles de la provincia, me resulta ilógico que se desentienda de medidas que buscan preservar la actividad y la economía», añadió.

Iramain también aludió a los dichos de Gettar sobre que en algunos locales no se solicita el pase sanitario para evitar conflictos. «Me parece de una falta total de conciencia, de palabra y de compromiso cuando en la reunión entre el sector privado y el Gobierno se acordó que si se lo haría», lamentó.

Finalmente, el productor aseguró que desde el sector que representa, la industria del entretenimiento, seguirán haciendo cumplir la obligatoriedad del pase sanitario con el esquema completo de vacunación.

«Desde nuestro sector no compartimos ni adherimos a los dichos de Gettar. Mantenemos nuestra palabra y el compromiso asumido con el Gobierno provincial, ya que queremos mantener las fuentes de trabajo y preservar la salud de los tucumanos. Me gustaría saber si Gettar va a pensar lo mismo el día que la situación sanitaria se vuelva insostenible y al Gobierno no le quede más salida que verse en la obligación de tener que volver imponer restricciones a bares, restaurantes y hoteles por no haber hecho cumplir la norma en su debido momento. Cuando se asume un compromiso y se da una palabra hay que cumplirla y respetarla”, concluyó.