En la previa, San Martín de Tucumán sabía que el resultado de su choque ante Defensores Unidos, por la fecha 29 de la Primera Nacional, en La Ciudadela, resultaba crucial para que sus aspiraciones por lograr el ascenso no se sigan resquebrajando. El partido resultaba de «doble filo» para el «Santo»: un empate lo iba a mantener fuera de los puestos de clasificación para el reducido, una derrota lo alejaba un escalón más, pero un triunfo podía llevarlo a escalar muchas posiciones, hasta los primeros lugares de la Zona A.

En un primer tiempo sumamente disputado y trabado, donde el que más intentaba era San Martín, aunque sin claridad ni profundidad, todo pareció oscurecer cuando el árbitro del encuentro decidió expulsar a Franco Meritello,a los 36 minutos de juego. Sin embargo, en la última jugada de esa primera etapa, cuando ya se jugaba el minuto agregado, Leonel Bucca y Emanuel Dening encendieron la luz para el «Santo»: «Lilo» tomó el despeje de un córner, ingresó al área y asistió, en las narices de arquero rival, para que «Manolo» la empuje mansamente hacia la red.

Al retorno del descanso, el dominio del encuentro continuó estando vacante. El CADU no sabía qué hacer ni cómo aprovechar la ventaja numérica que tenía, y San Martín intentaba pero sin precisión en la zona caliente. Ambos equipos contaron con un par de ocasiones claras de gol pero las malas definiciones de los atacantes «albirojos» y las seguras intervenciones de Darío Sand mantuvieron el 1-0 hasta el pitazo final que desató el desahogo del pueblo «ciruja» en Ciudadela. 

Así las cosas, San Martín logró quedarse con tres puntos de oro, sin jugar bien, sufriendo una nueva expulsión en el primer tiempo, pero luchando y defendiendo cada pelota como si fuera la última. Además, la valoración de la victoria se potencia debido a la escalada que el «Santo» pudo hacer en la tabla de posiciones de la Zona «A»: pasó de estar en el puesto 11, a ubicarse solitario en el cuarto lugar, con 42 unidades. Solamente lo superan Deportivo Morón con 43 puntos, Agropecuario con 46 y el puntero Almirante Brown con 50, todos con un partido más que los de Bolívar y Pellegrini.