El gran temporal que afectó a la ciudad no impidió que haya fútbol en la Ciudadela y San Martín ganó 2 a 0 frente a Independiente Rivadavia de Mendoza. Tino Costa de penal y Diego Sosa en el complemento sentenciaron la historia para el santo que sigue prendido arriba.

Los hinchas colmaron el estadio a pesar del mal tiempo y el equipo no los decepcionó. Salió a buscar el resultado desde el primer minuto y se encontró en ventaja gracias al penal fruto de una clara mano en el área.

En el segundo tiempo, pareció quedarse un poco y los fantasmas de otros partidos comenzaron a dar vueltas. Sin embargo, Pablo De Muner supo hacer los cambios justos y el equipo terminó liquidando el partido con el segundo gol.

Los santos recuperan la confianza a la espera de Ferro a quien visitará el próximo sábado. Se mantiene además como único escolta atrás de Belgrano que volvió a ganar, esta vez 1 a 0 frente a Güemes.